¿Sabes de esa sensación? Tienes millones de letras por dentro, billones me atrevería a decir, que se unen y hacen palabras que forman frases, frases que quieren conocerse para formar los párrafos de todas esas historias que no quieren salir de tu cabeza.
¿Y qué ocurre? ¿Acaso no hay forma de que salgan, de que todas esas historias vean la luz? ¿De que esas palabras se conviertan en el sonido que emite tu boca al hablar?
Esas palabras pierden sentido al salir fuera, esas horas que malgastaste pensando qué ibas a decir se materializan en esa ridícula sonrisa, en aquella estúpida mirada, que por mucho que signifiquen, por muy cargadas de sentimientos que estén, aunque resuman todo lo que quieras decir, sólo tú la comprendes, y para cualquier otro no será más que el silencio, aquel que siempre calla algo.
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