Refrescante, lúcido, sorprendente, apañado, caracolizante, reflexivo, apasionado, contemplativo, pausado, frenético, colifloresco... mi mundo y yo.

Zúhmántico: Se dice de aquella persona, ser o cosa enamorada de la vida, capaz de transformar momentos y situaciones vividas en simples y exiguas palabras y con la habilidad de ver el doble sentido de toda frase, comúnmente conocidos como romanticones.

Actualmente trabajando en esto: Zúh Malheur Bonheur.

Un ser bípedo, gracioso, crítico, osado, amoroso cuando se deja, con un montón de cosas por decir y con un contenido sentido de la austeridad verbal.


11 ago 2023

Leer, escribir, pasear, pintar, jugar, bailar, cantar, soñar, reír, comer, beber, hablar, compartir... Pero depende del día.

6 may 2023

2018 - 2022

¿Mi época adulta? No sabría decirte, a medida que me iba haciendo más y más mayor se me iba diluyendo el concepto de la adultez. Una relación estable, unas amistades que poco a poco se iban distanciando, casando o teniendo hijos, un mundo que gira demasiado rápido y no te da oportunidad para parar u poco y beber un vasito de agua.

En 2018 me fui a Sanlúcar de Barrameda tras volver de viaje a Ámsterdam (no, no fumé nada), bueno, nos fuimos, a trabajar en Doñana y cambiar radicalmente nuestra rutina diaria. Fue una experiencia dura, pero me enseñó mucho, aunque no la volvería a repetir, mi cuerpo no estaba hecho para aguantar ciertas personas. Para el cansancio físico sí, para el mental no. Ese mismo año creé una comunidad virtual de amigos porque las amistades de la vida real me resultaban complicadas y sabía que había personas por ahí que agradecerían un huequito digital donde poder socializar un poco.

El año 2019 vino como una continuación directa del anterior (evidentemente, ¿no?). Dejamos el trabajo en Doñana en plena temporada alta y comencé a trabajar, por fin, como profesor de inglés en una academia. Fue un año de reajustar todo lo perdido y de darle vueltas a muchas tuercas, pero de momento la cosa fluía bien. Volver a casa de mis padres tras haber sido un ser totalmente independiente fue lo peor de ese año, pero sabía que iba a ser temporal, o eso creía...

La pandemia de 2020 me golpeó duro. Me aisló de todo, me dejó vulnerable donde no quería estar y convirtió mi rutina en una espiral monocromática. Mi vida consistió en preparar clases online, darlas, sufrir muchas caídas de internet, terminar, volver a casa, regar las plantas en Animal Crossing y volver a repetir. Ese mismo año, tras el verano, volví a mudarme y tener casa propia, todo un respiro.

2021 y 2022 fueron dos años llenos de sorpresas buenas y malas por partes iguales. Dos años en los que comencé a descubrirme a mí mismo, a quitarme las máscaras que se me habían atorado en la piel y a ver la vida desde una posición fija; tumbado desde la cama mientras unos brazos invisibles me han impedido, hasta día de hoy, poder levantarme y... vivir.

2011

El año antes de comenzar la aventura de este blog fue como un edificio en ruinas. Me convertí en escombros de piedras buscando la manera de recomponerse. Tenía el corazón roto, pero también el alma y las ganas de seguir siendo la persona que me había tocado. Necesitaba una vía de escape, necesitaba plasmar todo ese sufrimiento de alguna forma. Así nació 'El planeta huérfano'. Un proyecto de miniserie que nunca logré llevar a cabo pero que sirvió como precedente para separar todo lo que había vivido hasta entonces y todo lo que me quedaba por vivir en dos mitades y continuar con mi vida con una herida descosida.

2007 - 2010

Educación secundaria obligatoria. O lo que es lo mismo... el infierno dentro del infierno. Sobreviví, pero también vi muchas vidas desperdiciadas pasando por mi lado. Hice algún que otro amigo y amiga, sí, algunos más duraderos que los del colegio, pero para mí era una mitad de la ruleta de la tortura. La otra mitad era mi casa, pero como dije en el anterior texto, solo a veces. También hubo profesores que me marcaron, y que a día de hoy sigo

Durante esta etapa afiancé mi amor por la música, especialmente por el rock y el metal, dos géneros que me acompañaron de la manita durante mi transformación hacia una persona adulta. También comencé a amar la fotografía, aunque esto vendría un poco más adelante. Mi mejor amigo era David, un chico que vino de Portugal a España y venía a mi casa la misma cantidad de veces que yo a la suya, gracias a ese equilibrio seguimos siendo mejores amigos hoy en día.

Creedme, fue una etapa dura y en ocasiones ridícula, así que ello combinado con mi aparente y creciente amnesia, forman el cóctel ideal llamado 'voy a dejar de escribir sobre estos años'.

2002 - 2006

Estos años corresponden a mi etapa escolar en el colegio Atlántida, al cual fui tras mudarme por segunda vez. A continuación presenciaremos un batiburrillo de anécdotas y descripciones de cosas que solían gustarme y hacer durante esos años.

Algo que recuerdo muy bien es que durante mi primer año en este colegio, tercero de primaria, empecé a dar por primera vez inglés en clase. Yo ya sabía bastantes cosas porque había jugado a juegos y leído muchas cosas en inglés, pero académicamente era la primera vez. Al principio ciertos alumnos me llevaban ventaja, pero poco a poco logré ser el que más destacaba en esta asignatura durante todos los años próximos. Hice amigos en el colegio, sí, algunos me invitaban a su casa en otoño y se me metían en su piscina sucia para salir de ella lleno de arañas por todo el cuerpo, otros me invitaban constantemente a su casa pero nunca querían venir a la mía, otras me invitaban rutinariamente a su casa para criticar a otros niños. En resumen, me invitaban a muchas casas. Perdí prácticamente el contacto de todos los amigos que hice en el colegio. Hubo profesores que me marcaron, y alguno que otro para mal. El de inglés me motivó a emprender mi camino hacia la enseñanza y endulzó mi amor por la música. El de matemáticas se sentaba en mi pupitre con su culo gordo y me perturbaba un poco. Uno de mis tutores fue profesor de mi padre. La de música tenía un nombre formado con dos notas musicales. Y... bueno, hubo más, un profesor vampiro, un enano y un sugar daddy. Ya... por aquel entonces aún no conocía esta expresión, pero las dudas que me generaban este hombre sí eran reales a mi temprana edad. Uno de los compañeros de clase que me invitaba a su casa, se rompió una pierna durante un curso y apenas salí al recreo ese año para quedarme con él. Solía juntarme con los malotes sin ser yo nada de eso. O sí... pero nadie se daba cuenta.

Fuera del colegio mi mundo era divertido, a veces. La vida en mi casa era un infierno, pero solo a veces. Solía evadirme bastante jugando, escuchando música, dibujando... o saliendo con amigos. Sí, tuve amigos variados y de todos los tipos durante estos años. Amigos con los que jugué a las canicas, otros con los que jugué a videojuegos, principalmente Pokémon y otras amigas con las que robaba chucherías. La vida daba muchas vueltas y yo era un pez que se mareaba muy rápido. Otro de mis amigos fue Pongo, un caniche que adoptamos tras un encuentro fortuito. Era bastante mezquino y una vez me mordió y me dejó una cicatriz que aún a día de hoy sigo teniendo, el mejor tatuaje de todos. Mi nueva casa también era mi amiga, grande, espaciosa, con patio trasero lo suficientemente espacioso para meter una piscina... un paraíso para un niño de aquella edad. No estaba preparado para cambios bruscos, ¿y qué sucedió? Pues que llegó la hora de abandonar el colegio y poner un pie en el instituto. Que alguien me de una biodramina.

8 abr 2023

Este soy yo en toda mi esencia

Una pantalla en blanco frente mis ojos
Vacía, sin saber qué escribir

Esto es un libro y cada entrada es una página

Y la arranco
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y arranco otra
y ya no quedan más

asdfghjklñ

Soledad emocional
Trastorno de despersonalización
Burnout

12 mar 2023

2001

Hubo odiseas en el espacio que me rodeaba. Este año fui al cine por primera vez en mi vida (realmente fui antes, pero esta fue vez más temprana que yo recuerde). La película era Shrek, y recuerdo ir con mi padre y un chico repetidor de clase bastante gamberro, al cual tuvimos que ir a recoger en coche y me sorprendí de lo conflictivo que se veía el barrio. No recuerdo el nombre de este chico. Aunque sí recuerdo que en el suelo, mientras esperaba en la calle a que bajase, me encontré un juego pirata de ps1 de Asterix y Obelix que funcionaba a la perfección a pesar de que estaba pintado con rotulador negro y sucio por todas partes. No sé dónde lo guarde mientras estuve en el cine.

Dentro de casa no había mucho cambio, solía jugar con mi amiga Estefanía, sobre todo a los Pokémon. Me aislaba jugando a videojuegos y jamás me aburría solo. En el colegio empezaba a no sentirme bien. Siempre tuve problemas desde pequeño con mi propensión a las arcadas por culpa de mi campanilla gigante. Eso, sumado a que era incapaz de desayunar por las mañanas... pues os podéis hacer una idea de mi rutina diaria todas las mañanas. Aunque el recuerdo más claro que tengo de este año es ver la noticia del 11-S por la noche con mi madre en el salón mientras cenábamos un sándwich de pollo y yo jugaba con la lámpara-teléfono.

Mis padres tenían planes de mudarse de casa, yo empezaba a no estar cómodo con ciertas personas del barrio y el piso se nos quedaba pequeño. Así que soñaba constantemente con vivir en una casa más espacio y tranquila. Pero para ello tenía que esperar hasta el 2002.

Estos textos están siendo más cortos, sí, pero porque mi memoria no es la misma que la de hace unos años. No sé si es algo normal o debería empezar a preocuparme. No lo sé, pero gracias a esto ya he escrito cuatro párrafos sobre este año.

11 mar 2023

23 feb 2023

Fragmento de "Otra puta novela de amor"

Él no lo sabe, y quizá ella desconozca los frutos que algún día llegue a recoger, víctima de la histeria, ese voraz y despiadado monstruo que trae celos como ofrenda, desamor para los más atrevidos, desilusión para aquellos que anhelan con todas sus fuerzas algo, y la muerte para aquellos que se aventuren en los espinosos trechos del amor.

Desdichada es la rosa que nace con espinas en su cuerpo,
y culpa es la mía por haberte mirado a los ojos aquel día.

Un corazón negro

Neumoconiosis cardiovascular, cuando la vida ya no le proporciona al corazón la voluntad suficiente para seguir viviendo.

28 ene 2023

El color de la asfixia

Púrpura, cuando el oxígeno no llega.
Púrpura, cuando el despertar es una fiebre.
Púrpura, cuando la piel yace fría y dolorida.

¿Puede un color agarrarte del cuello y guiarte por donde no quieres ir?
¿Puede acaso la felicidad ajena arrebatarte la tuya?
¿Puede drenar y mermar tu existencia?

¿Existe un color para ese instante de soledad al estar rodeado de gente?

Sin aire nací, sin aire moriré.
Toda una vida pintada del mismo color.
Púrpura.

26 ene 2023

20 ene 2023

8 ene 2023

En la esquina del bar

Ahora mismo lo que más deseo en el mundo es estar tomándome algo en un bar con luz tenue donde haya un músico tocando una canción de piano triste y que alguien se acerque mientras agite los hielos del vaso para preguntarme por mi historia y que esa persona esté dispuesta a oír toda una novela sin puntos comas ni final

7 ene 2023

Miro La Tierra desde La Luna

Es inmensa, casi como si pudiera tocarla,
y comienzo a dudar de mi cuerpo,
comienzo a dudar de mi mente,
no sé si realmente están allí,
o aquí.