Refrescante, lúcido, sorprendente, apañado, caracolizante, reflexivo, apasionado, contemplativo, pausado, frenético, colifloresco... mi mundo y yo.

Zúhmántico: Se dice de aquella persona, ser o cosa enamorada de la vida, capaz de transformar momentos y situaciones vividas en simples y exiguas palabras y con la habilidad de ver el doble sentido de toda frase, comúnmente conocidos como romanticones.

Actualmente trabajando en esto: Zúh Malheur Bonheur.

Un ser bípedo, gracioso, crítico, osado, amoroso cuando se deja, con un montón de cosas por decir y con un contenido sentido de la austeridad verbal.


25 oct 2013

Miradas ovíparas

Todos me miraban, todos mantuvieron su mirada en mí. Cada una de esas personas que veía hasta donde me alcanzaba la vista pararon un momento sus ajetreadas vidas para observarme. Como si esperaran algo sorprendente de mí; como si un artista fuese; como si mi rostro dibujara sobre lino el retrato de mi interior. Esas miradas, todas esas miradas, dibujaban un siniestro rastro hacia mi persona. Quizás fuese el rocío, o quizás fue solo el frío sudor que la vergüenza hacía que de mi cuerpo manara. Como si la muerte deslizara su frío dedo por mi mejilla, sinuoso y coqueto. Tal vez nunca tuve que hacerlo; tal vez tuve que pensarlo antes de hacerlo, pero de una cosa estoy seguro, no me arrepiento. No me arrepiento de ser el único peón al que Rey no puede tumbar; no me arrepiento de ser el aceite que permanece impasible ante el amenazante agua; no me arrepiento de ser ese rayo de luz que se cuela por el único recoveco que la persiana no pudo tapar. Así que seguí, hasta que me hiciese daño, pues ninguna mirada impediría que dejara de rascarme el huevo izquierdo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario